Nota 21

DE FUEROS Y DE PRUEBAS

El ya irritante oír que fulano o zutana buscaría una diputación o una senaduría para ponerse a cubierto de la Ley, cuando están metidos hasta los ijares en innumerables y graves latrocinios contra esa Argentina de la que se adjudican la misión de resguardar sus leyes y su Constitución, se agrava por la naturalidad con que lo tratan medios que reputan de serios, cuando es vox populi que permanecen sueltos por la gracia de una Justicia extraviada de su esencia por ideologías o una infinita y morbosa codicia.

Además se trata de un absurdo. Los fueros los protegen de imputaciones relativas a sus dichos, o a las consecuencias de las medidas que pudieran aprobar con su voto, porque sería inaceptable que los que deberían ser ejemplares, tuvieran un brevet especial para delinquir, ¡cuando ya es irritante que sus pares deban acceder a despojarlos de fueros, para que la Ley pueda incoarlos de sus innumerables y cuantiosos desfalcos, lo que no pasa de “otra” de la burocracia “legal”, ¡con fuerte olor a aquella lealtad de la omertá!

Muchos para nada respetables abusan del debido al cargo, que por el déficit de nuestra cultura cívica, los inmuniza no sólo contra sus cuantiosos y flagrantes calotes, sino aun contra la mínima crítica, lo que sumado al hecho de que ciertos jueces abusando de los mil artilugios de una Ley cincelada al paladar del lobby cacófilo, si no se hacen cargo invalidan o desestiman pruebas flagrantes, como los oportunos incendios de archivos esenciales a la Justicia, desde aquél de la Secretaría de Turismo de Scioli, ¡hasta los de Devido en la propia Rosada!, que deberían ser agravantes para intensificar las causas ligadas a ellos. Aunque las trituradoras a full destrozando recibos, facturas y legajos, y con ellos mil evidencias que tantos insisten en no ver, y cuando bastaría exigirles que justificaran sus tan inconsistentes fortunas, que no superarían un juicio oral, donde no podrían justificar bunkers, cadenas de hoteles semi vacíos, ni fortunas, mansiones o estancias por docenas, y menos explicar visitas a las “paradisiacas” Scheilles, y sola mente pr unas horas.

Tan escandaloso “ramillete” bastaría para conminar por ley a fiscales y jueces a actuar de oficio a la mera sospecha o mención pública de algún delito, en tiempo y forma y sin desestimar evidencias que restallan al punto de tornar irrelevantes las pruebas, con tan abrumadores “cuerpos del delito”, ni más “armas homicidas” que la chequera del Tesoro, cuya “sintonía” con cajas fuertes, bolsos y bóvedas, cuentas en Suiza, acciones, valores o propiedades adquiridas tras asumir su cargo, no dejan la mínima duda, pero en todo caso los sospechosos de siempre tendrían la chance de legitimar sus bienes.

Por eso desespera que de tamaña y poli tentacular entente mafiosa, apenas haya tres o cuatro mojarras en gayola, después de una prolongada década de asolar a la Argentina, y porque Lázaro Báez no tenía los fueros de Devido, para protegerlo por su asociación para delinquir con el entonces gobernador Néstor Kirchner, quien apenas fundada la para nada tuerta Austral Construcciones, atosigó a su cómplice con adjudicaciones de obras y sus abundantes y múltiples partidas, anticipadas y sin ni seguir el desarrollo de las obras que se diluían a los pocos cual estatuas de cera en el Sahara. Delito de meros rateros, pero agravado por sus mil y terribles implicancias, que llegaron al genocidio.

Cuando el enriquecimiento del contratante corre paralelo al de sus contratados, con proyectos harto sobrevaluados y aun varias veces fondeados, sin haber dado principio de ejecución a las obras, ni haber adquirido las tan esenciales topadoras, ni el parque de máquinas y albergues para obras de tal envergadura, y sin los que una adjudicación no pasa de una nueva tramoya, un baldón para nuestros Poderes, una descalificación igual o más grave para nuestros jueces, y una vergüenza ante el mundo, que el mayor centro cultural de nuestro país, todavía lleve el nombre de un redomado, insaciable y vulgar chorro, como que sus cercanos cómplices sigan currando en altos cargos y hasta aspirando a otros más altos todavía, y encima soliviantando a la calle y poniendo palos en la rueda al gobierno que es su contracara, y que lucha a brazo partido para levantar los muertos que al decir de Reutemann, le dejaron con moñito color de rosa y todo.

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Junio 21, 2017 11:38 P-745

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